Mientras Mauricio cae en la encerrona de Emilia y se encuentra a solas con Fe en la tienda, Nicolás quiere llamar a declarar a Francisca en el juicio contra Severo. Finalmente, Julieta y su padre se marchan de Puente Viejo pero el coche se avería. El viernes, en “El secreto de Puente Viejo”.
Por
Alicia Marín
Mientras en el capítulo del jueves, Consuelo se marcha y don Ignacio pierde los nervios con Julieta, el viernes, don Ignacio rectifica y templa poniendo una excusa agrícola: son los nervios, pero… han de marcharse cuanto antes. Mauricio informa del regreso de Consuelo para que don Ignacio actúe en consecuencia. Luego, Julieta cuenta a Emilia que Consuelo se ha ido, cuando su padre llega a tiempo de evitar que le cuente que ellos también se van. Ignacio presiona… o marchan ya o se encontrarán con consecuencias desastrosas en las tierras. Ella accede, ni irá a la inauguración de la Casa de Acogida que los jornaleros empiezan a ocupar felices.
Entretanto, Carmelo calla y niega su participación y conocimiento de los planes de Severo, pero luego se siente como un cobarde; Adela le hace ver que solo ha hecho lo que Severo le pidió. Nicolás quiere llamar a declarar a Francisca Montenegro, pero el Juez se niega.
Por otro lado, Emilia pide opinión a los chicos sobre interceder entre Mauricio y Fe. ¡Ni hablar! Pero, igualmente, Emilia pide a Gracia una copia de la llave de la tienda de Fe. ¿Qué tramará? Mauricio recibe una nota de Fe, citándolo en la tienda, ignorando que es una encerrona de Emilia. El capataz acude a la cita y Fe jura que no lo citó, pero cuando quiere irse, la puerta se atranca.
Finalmente, Julieta y don Ignacio salen camino de las tierras de éste cuando el coche se avería.
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