Los aprendices de “Maestros de la Costura” empezarán la noche cosiendo una falda de tablas, en una prueba en la que les acompañarán Palomo y Caprile. Después visitarán la sede madrileña de MIRTO donde reproducirán una de las camisas de la firma. Para la eliminación, pujarán por materiales para customizar un mono.
Por
Alicia Marín
Los aprendices, que ya han descubierto que el trabajo en el taller del talent de costura no tiene nada que ver con hacerlo en casa, comenzarán la noche cosiendo una falda de tablas, una prenda fundamental en cualquier armario. Lo harán en 90 minutos y tendrán que poner mucho empeño porque Palomo y Lorenzo Caprile enhebrarán la aguja para realizar la prueba con los aprendices. Elena Benarroch, una de las primeras en modernizar la peletería y que lleva 38 años en el mundo del diseño de moda, les enseñará a completar estilismos para venderlos como hace ella en su tienda. Seguidamente, en la prueba de exteriores, los aprendices visitarán la sede del grupo MIRTO, donde el jurado intentará que aprendan de sus errores. Por equipos, confeccionarán una camisa masculina, que está compuesta por 18 piezas de tela que se confeccionan en 80 pasos independientes. Además, su trabajo deberá reflejar la esencia de esta firma. Su fundador, Ricardo Fraguas, y sus hijos Ricardo y Elena les darán consejos que les serán de mucha utilidad. La estilista, empresaria y periodista de moda Fiona Ferrer seguirá de cerca el desarrollo de la prueba.
Finalmente, en la última prueba de la noche, los aprendices pujarán con tiempo por diferentes materiales y adornos para customizar un mono azul. Tendrán papel de cocina, hule de plástico, retales de cuero tintado, luces leds… Cada vez que quieran pujar por un producto, se les descontará del tiempo que tengan para realizar la prueba. El jurado tendrá en cuenta la creatividad que demuestren a la hora de insertar los elementos con los que cuenten.