Alberto Chicote se enfrenta a un restaurante iraní plagado de deudas y falta de profesionalidad por parte de sus trabajadores.
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Redacción vemosTV
Farid, dueño del exótico local, invirtió 1 millón de euros para levantar un restaurante de cocina de Oriente Medio caracterizado por su decoración ostentosa y majestuosa. Sin embargo, tanto lujo no logró el éxito del negocio, por lo que hace unos meses, Farid decidió incluir en la carta comida mediterránea y típicamente española para atraer a la clientela. Pero esta combinación extraña de decoración iraní y alimentos españoles ha provocado el rechazo de los que van allí a comer.
A este problema se une otro más, la falta de competitividad de los camareros del local, quienes intentan engañar continuamente a Chicote. El equipo no da una: confunden los pedidos, no hay coordinación entre la sala y la cocina, discuten y se gritan. Por todo ello, Alberto Chicote visita el Cool Palace para intentar salvarlo, pero el propio chef admite que es un reto muy complicado. ¿Logrará el carismático Chicote sacar a flote el restaurante?