Los espectadores de "Isabel" serán testigos el próximo lunes de la repentina muerte del nieto de los Reyes y de cómo este hecho desata la ambición del archiduque Felipe, que ya ve en su sucesor al nuevo Carlomagno. Sin embargo, Fernando propondrá un pacto al rey de Francia que desbaratará los planes de su insaciable yerno.
Por
Alicia Marín
Mientras en el capítulo anterior fuimos testigos de la muerte de la princesa Isabel y de cómo todo se complicaba para la Reina, en la entrega del lunes, una nueva muerte sembrará el desasosiego en el reino de Castilla y Aragón. Después de que todas las esperanzas de Isabel estén puestas en su nieto, Miguel de la Paz, a quien la Reina dedica las mayores atenciones, su repentina muerte desatará la alarma en los reinos Católicos, y tanta ambición en el corazón del archiduque Felipe como dolor y desesperación en el de Isabel. La única opción válida para Isabel y Fernando es hacer venir a Juana y a su esposo para que las Cortes los juren como herederos, a pesar de todos los inconvenientes conocidos.
Bien distinta es la situación en Flandes, donde Felipe ha cumplido su sueño de tener un heredero varón y, posteriormente, se imagina ya ocupando los anhelados tronos de Castilla y Aragón. Incluso propone un pacto al rey de Francia para convertir a su hijo en el nuevo Carlomagno, todo ello a espaldas de su esposa y de sus suegros. Enterado de la maniobra, Fernando propone al rey de Francia que se repartan el reino de Nápoles, sin contar con el Papa, y que se haga la paz entre sus reinos. En Granada, la revuelta de los musulmanes es tan virulenta que ni el propio Gonzalo Fernández de Córdoba es capaz de sofocarla en el tiempo requerido. Fernando acude y es implacable contra los alzados.
Cabe resaltar que “Isabel” batió el pasado lunes récord de temporada: cerca de 3,2 millones de espectadores con el 16,4% de cuota, siguieron un intenso capítulo en el que los Reyes vieron cómo fallecía su primogénita, la infanta Isabel, y cómo este hecho complicaba la sucesión en el trono.