La de Cañete y Teresa, una de las parejas más esperadas por los seguidores de “La Moderna”, por fin ha dado el paso de confirmar su relación. Repasamos su historia y el camino lleno de altibajos que han recorrido hasta convertirse en el “shippeo” que todos esperábamos, #Cañesa.
Fátima Cruz
Si Cañete y Teresa están juntos es gracias a Miguel y Trini. El matrimonio más famoso de “La Moderna” se propuso hacer de celestina para que el jefe de camareros y la encargada del salón de té se dieran cuenta de que estaban hechos el uno para el otro.
Aunque en un principio parecía de locos que Cañete y Teresa pudieran formar una pareja, los propios espectadores se convirtieron en cómplices de Miguel y Trini, viendo cómo las clases de baile a las que les apuntaron a traición lograron que comenzaran a verse como algo más que compañeros.
El primero en empezar a ver a Teresa de otra manera fue el jefe de camareros, que no tardó en declararse: “Yo siempre la había visto como mi encargada. Nunca se me había pasado por la cabeza que pudiese haber algo más que una relación profesional”. Y añadió, dejando a Teresa sin palabras: “Desde que bailamos juntos todo cambió. Ya no solo la veo como mi encargada, sino también como una mujer bellísima y simpática y muy interesante”.
Pero las cosas no iban a ser coser y cantar. A Cañete le costó que Teresa aceptara que entre ellos estaba surgiendo algo más que amistad, aunque una vez derribada la barrera entre ambos decidieron dar pasitos hacia adelante teniendo sus primeras citas.
Todo parecía ir rodado hasta que apareció en escena Mario, el ex prometido de Teresa, a quien no había vuelto a ver desde que la dejó plantada en el altar.
Mario, un estafador con mucha labia, consiguió que la encargada de “La Moderna” dudara de todo y decidiera darle otra oportunidad, dejando a Cañete destrozado. Pero las intenciones de Mario no tenían nada que ver con el amor, sino que se había vuelto a acercar a Teresa con la intención de engañarla y conseguir sus ahorros y los de sus compañeros.
Por suerte, Cañete se dio cuenta de la trama que había creado Mario y los salvó a todos de la ruina. Sin embargo, este incidente hizo que Teresa volviese a desconfiar de los hombres, cerrándose en banda a una nueva relación.
La audiencia de “La Moderna” al límite por la última jugada de TVE
La amenaza de doña Lázara consigue unirles de nuevo
Con la llegada de doña Lázara a “La Moderna” Teresa vio cómo, la que en un principio era una dependienta más, le tendía una trampa tras otra para lograr no solo arrebatarle el puesto, sino convertirse en su superior como gerente del salón de té.
Teresa, que no se fiaba nada de doña Lázara, decidió entonces investigar por su cuenta, hasta averiguar que su compañera había sido despedida de su anterior trabajo en unos conocidos grandes almacenes por estar relacionada con la muerte de una dependienta.
Sin dudarlo, la encargada fue a contárselo a don Fermín, el dueño del local, que no dudó en rescindir el contrato de doña Lázara. No obstante, la gerente usó sus malas artes para hacer dudar a don Fermín, quien pidió opinión a Cañete.
Para sorpresa de Teresa, Cañete defendió a doña Lázara, convencido de que, quizás, podría haber más de una versión de los hechos. Ese gesto enfadó mucho a Teresa: “No me ha gustado nada que le dijeras a don Fermín que doña Lázara se merecía el beneficio de la duda. Se supone que estabas conmigo en esto y me has dejado vendida. No pensaba que tú precisamente me dejases de apoyar”, le recriminó la encargada a su amigo.
Cañete, haciendo gala de su calma habitual, le explicó a Teresa que lo único que intentaba era protegerla. “No quiero que lleves el enfrentamiento tan lejos que te metas en un problema ¿Tú te das cuenta del poder que tiene esa mujer que puede hacer que te despidan?”.
El reparto de “La Moderna” se renueva: conoce a los personajes que llegan a la serie de TVE
Viendo que el enfado de Teresa iba a más, al jefe de camareros no le quedó otra que sacar la artillería pesada y desnudar sus sentimientos: “Creo que te he demostrado las suficientes veces que te he apoyado y que estoy a tu lado y que quiero estar ahí. Puede que no sea perfecto, pero me importas mucho”.
Y, cogiendo aire, Cañete se sinceró del todo: “Teresa, yo te quiero. Me gusta todo de ti. Bueno, tienes mucho genio, pero me gusta mucho más que tengas carácter. Por eso me preocupa tanto lo de doña Lázara, porque si la cosa se acaba torciendo no sé qué voy a hacer yo sin tenerte cerca”. Dicho esto, salió corriendo, dejando a Teresa con la palabra en la boca.
Teresa se declara a Cañete
Al salir del trabajo, Teresa interceptó a Cañete y le dijo que nadie nunca le había dedicado unas palabras tan bonitas. “Yo sé que a veces no estamos de acuerdo, pero es cierto que siempre estás ahí para mí, que puedo contar contigo para todo”, reconoció ella.
“Siempre creí que el amor era algo romántico, emocionante también, pero creo que estaba equivocada, que el amor bueno, el bueno de verdad, lo que te hace sentir es paz, tranquilidad también, sentir que la otra persona está ahí pase lo que pase. No quiero perder el tiempo porque creo que ya lo hemos perdido mucho, así que allá va. Cañete, ¿quieres ser mi compañero de vida?”, le preguntó Teresa a Cañete. “Por supuesto”, respondió él, para terminar de sellar su conversación con un largo beso.
Y así, Cañete y Teresa por fin han dado un paso adelante para formalizar su amor. ¿Vivirán felices para siempre o la desconfianza por lo sucedido con doña Lázara los pondrá a prueba más de una vez? Lo descubriremos en los próximos episodios de "La Moderna".
