Mientras aparece un señor, don Amancio, al que Elsa se abraza emocionada, Adela tiene un trozo de metal en la cabeza y pide al médico que no diga la verdad a Carmelo. Además, Julieta descubre que Fernando ha perdido la cabeza. El jueves, en “El secreto de Puente Viejo”.
Por
Alicia Marín
Mientras en el capítulo del miércoles, Saúl pide a Julieta que registre las cosas de Fernando, el jueves, Mauricio ayuda a Julieta a librarse de Prudencio para poder registrar las pertenencias de Fernando. Julieta encuentra el portafolios de Fernando y lo que encuentra la deja anonadada: en los papeles solo pone “YO SOY FERNANDO MESÍA”. Ha perdido la chaveta, no hay duda.
Por otro lado, se corta la emoción cuando Elsa confiesa que solo quiere saber la razón por la que Isaac conocía todo sobre su madre. Por tanto, continúan unos preparativos de boda en los que Isaac participa sin ningún entusiasmo. Después, Elsa comparte con Consuelo sus deducciones respecto a Antolina: cree que podía tener una relación más allá de la amistad con su hermano Jesús. Elsa hace preguntas sobre Jesús, y Antolina se pone nerviosa cuando Isaac recuerda sus últimas palabras: te ha engañado. Así, Isaac se libra de Antolina para contarle a Elsa lo que dijo su hermano. Elsa habla con Marcela cuando aparece un señor: don Amancio. Elsa se abraza a él, emocionada, ¿quién es? En el hospital, Adela tiene un trozo de metal en la cabeza y no se lo pueden quitar. Adela pide al médico que no diga a Carmelo la verdad sobre lo que le ocurre y le dan el alta. Carmelo y Severo tienen coartada que los exime de cualquier responsabilidad en el caso de Basilio.
Finalmente, mientras doña Magdalena ha desaparecido, Raimundo cuida de Francisca cuando llega Fernando.
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