Emel se siente una carga para sus hermanos, especialmente para Asiye, por lo que decide volver al orfanato a pedir asilo. Además, Akif organiza un evento en el club a espaldas de Ahmet que termina con los invitados inconscientes, entre ellos Nebahat y Şengül. Te avanzamos todo lo que pasará en la segunda mitad del capítulo 66 de "Hermanos", el martes 29 de agosto a partir de las 22:45 horas en Antena 3.
"Hermanos" es la serie que triunfa en el prime time de Antena 3 los lunes y martes. La ficción turca, que cuenta la historia de los hermanos Eren, ronda el 13% de cuota de pantalla y tiene más de un millón de seguidores cada semana que ya no pueden perderse las tristezas y alegrías de los Eren. ¿Qué más podrá pasarles? ¡Te lo contamos a continuación!
En el episodio anterior, Asiye se postuló a una beca para estudiar en Italia, pero sus obligaciones con Emel frenaron sus anhelos. Mientras, Leyla y Ömer no pudieron ocultar su buena sintonía, ni siquiera en presencia de Süsen.
Asiye ha vendido su abrigo para poder costear los nuevos zapatos de Emel y además decide no presentarse candidata a la beca para estudiar en el extranjero.
Emel, por su parte, se siente muy mal por ver a su hermana en esa tesitura, y así se lo hace saber a su tío Orhan. Este se lo cuenta a Gönül, que se ofrece a comprarle un abrigo a Asiye tan pronto como sea posible, ya que están en pleno invierno y la joven podría enfermar.
Pero, a la hora de la verdad, Gönül no tiene intención de comprarle un abrigo nuevo a Asiye, sino que empaqueta uno usado de Afra y se lo entrega a Orhan, que cree que es de estreno.
Cuando Oğulcan ve a su prima con el nuevo abrigo, rápidamente identifica que es de Afra. Al decírselo a Asiye, la joven lo rechaza y es Oğulcan quien se lo devuelve a su dueña.
En el colegio, Aybike encuentra la redacción con la que Asiye se iba a presentar a la beca hecha una bola tirada en la biblioteca. No tiene firma, así que no sabe que es de su prima.
Sin embargo, a Aybike se le plantea un dilema, y, tras pedirle opinión a Tolga, decide presentar esa redacción como si fuera suya, ya que está escrita de manera excelente.
Lo que no espera Aybike es que, a la hora de entregar las redacciones, Afra reconozca el escrito de Asiye y la acuse delante de todos de copiar. Aybike lo niega todo.
Por otro lado, tras ver cómo Leyla y Ömer estaban interesadísimos en el partido de baloncesto, Süsen se presenta en clase con tres equipaciones para ver el siguiente partido en su casa. Es obvio que trata de ganar puntos frente a su novio, ya que se siente amenazada por Leyla.
No obstante, Leyla le confiesa a Tolga que no piensa aceptar la invitación, pues no va a entrometerse entre la parejita.
Mientras tanto, Şengül sigue centrada en su candidatura a representante del vecindario. Akif ha decidido apoyarla y ella le ha prometido que, si gana, le dará un puesto en el Consejo.
Akif está dispuesto a todo por la candidatura de Şengül, tanto que se ofrece a organizar una ceremonia de circuncisión gratis para todos los niños del barrio en el club, todo a espaldas de Nebahat y de Ahmet, los actuales dueños. De hecho, pone la excusa de que van a ir a desinfectar el local para que ninguno aparezca por allí.
Pero, a pesar de sus intentos, Nebahat se presenta en el club en mitad del evento de Akif y se queda alucinada a la par que indignada con todo lo que ve allí, pero no tarda en unirse a la fiesta.
Casualmente, una llamada entre Yasmin y Afra para preguntar por unos deberes del colegio saca a la luz que se está celebrando algo en el club, y hasta allí van Gönül y Ahmet. La primera, a regodearse en la desgracia de Şengül; el segundo, a pedir explicaciones.
Lo que no esperan es que, al poco de llegar Ahmet al club en actitud muy agresiva, todos los invitados comiencen a desvanecerse, empezando por la propia Nebahat, Tolga y Şengül. La gente va perdiendo el conocimiento poco a poco, mientras Aybike trata de avisar a los servicios de emergencia.
Por otro lado, Berk le tiende una trampa a Asiye y hace que Doruk se enfade seriamente con ella. Pero esa no es la única desgracia de Asiye. La joven acompaña a Emel a quitarse la escayola y no le queda otra que, después, llevarse a la niña a su lugar de trabajo.
La mala suerte hace que Emel tire un zumo de naranja sobre unas telas blancas y lo manche todo, lo que provoca la ira del jefe de Asiye, que la despide.
Emel se siente muy mal por Asiye, ya que piensa que es una carga para ella y Ömer, que decide presentarse en el orfanato y pedir que la acojan.
