Mientras Francisca le hace ver a Tristán que María se ha burlado de él, don Anselmo recibe noticias de Cuba. Aurora muestra un comportamiento cada vez menos disciplinado al tiempo que, mientras Inés canta a su hijito, Amalia anuncia que está embarazada y Bosco se muestra feliz con la noticia. Mañana, en “El secreto de Puente Viejo”.
Por
Alicia Marín
Mientras en la entrega de hoy hemos comprobado que Tristán comienza a sospechar de María, mañana, sin pretenderlo, Francisca le hace ver a Tristán que María se ha burlado de él. María, que no podía más, ha venido a ver a su gente, les asegura que todo terminará pronto. Mientras, don Anselmo recibe por fin un telegrama desde Cuba y se queda pálido. Tiene que ver a María.
En el Jaral, Aurora no sólo no mejora, sino que cada vez muestra un comportamiento menos disciplinado; parece que su incapacitación será definitiva. El médico cree que deben impedir que la joven haga siempre lo que quiera, hay que ponerle límites. Así, Conrado y Lucas hablan de Aurora: los dos la quieren… pero no aclaran cómo.
Por otro lado, mientras en la mente de Severo se agolpan los recuerdos y no quiere hacer nada especial por Nochebuena ni Navidad, Amalia se asegura que su padre no desveló su secreto a Bosco cuando estuvieron bebiendo juntos en el pueblo. Y así, mientras Inés canta a su hijito, Amalia anuncia que está embarazada. La noticia cae como una bomba en la mesa de la Casona, en plena Navidad. Bosco no cabe en sí de emoción. Finalmente, ante la afonía generalizada, con mucha pena se cancela el concierto navideño. Este año no hay coro y todos lucen tristes en la plaza, parece un mal presagio… hasta que, de pronto, unas angelicales voces surgen de dentro de la casa de comidas. Son los forasteros, cantan como los ángeles, ¿o lo son? La gente se reúne para escuchar los villancicos y se extiende el candor por la plaza. ¡Feliz Navidad!
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