Después de que Hugo no fuera capaz de decir la verdad sobre la implicación de Bruno, Eloy usa una sucia estrategia para exculpar a sus clientes. Sin embargo, Marta, la abogada de Alba, guarda un as bajo la manga… El miércoles 4 de mayo a las 22:45 horas en el noveno capítulo de “Alba” en Antena 3.
Alicia Marín
El miércoles 9 de marzo, “Alba”, la adaptación española de la exitosa ficción turca “Fatmagül”, llegó en abierto al prime time de Antena 3 arrasando a sus competidores. La serie, líder y lo más visto de la noche, también se ha coronado como el mejor estreno de una serie de Antena 3 desde 2009.
“Alba” es un drama emocional, una historia de amor en medio de lo imposible que protagoniza Elena Rivera. La serie cuenta la historia de Alba, una joven sin miedo al éxito que vuelve a su pueblo por vacaciones, pero su regreso se torna en tragedia cuando unos chicos la agreden sexualmente durante una noche de fiesta. La joven aparece desnuda en la playa, y luchará por destapar toda la verdad, pero no lo tendrá nada fácil: pruebas que desaparecen, amenazas, chantajes... Todo se pone cuesta arriba para la protagonista. ¿Conseguirá descubrir la verdad y hacer justicia?
Mientras en el octavo capítulo, Hugo confesó a Alba que Bruno no la violó, pero no logró que dijera la verdad en el juicio, en la novena entrega, Eloy usará una sucia estrategia para exculpar a sus clientes. Sin embargo, Marta, la abogada de Alba, guarda un as bajo la manga que podría darle la vuelta al caso.
Así es el noveno capítulo: “Un as bajo la manga”
Alba y Bego no pueden creer que Hugo haya sido capaz de mentir. Después llega el turno de Jacobo y Rubén, quienes declaran que Alba actuó de manera proactiva. “Sus gemidos eran claramente placenteros, de principio a fin”, asegura Jacobo.
Tras su declaración, Marta le pregunta si tiene experiencia en este tipo de situaciones y si había practicado el sexo en grupo anteriormente. La respuesta de Jacobo deja perplejo a Eloy Duvall y Rubén no puede creerse lo que acaba de oír por parte de su primo. Y es que, Jacobo afirma que su primo ha mantenido sexo en grupo en otras ocasiones.
En el turno de Rubén los nervios se apoderan de él y Marta anuncia la presentación de una prueba de última hora que genera los murmullos de toda la sala: “¿Considera normal su trato hacia las mujeres?”. La abogada de Alba pretende “demostrar las aficiones del acusado y su relación con el sexo femenino”. Se trata de una prueba con la que no contaban los Entrerríos y buscan incapacitar a Rubén para invalidar sus actos, ¿cómo lo harán?
Pero la abogada no es la única con un as bajo la manga, ya que Eloy saca a relucir un dato de Alba que Marta desconoce. El abogado de los Entrerríos destapa que entre Rubén y Alba hubo más que una amistad en 2015. Rubén declara que él y Alba se liaron el verano de 2015 cuando Eloy le pregunta qué ocurrió entre ellos: “Tuve que cortar con ella, no conectábamos”, asegura el joven Entrerríos. Esta sucia estrategia es la última baza del abogado de los Entrerríos para hacer parecer inocentes a sus clientes. Marta, perpleja, cree que Eloy está induciendo al testigo “descaradamente”, mientras Alba no puede creerse que vayan a juzgar al milímetro toda su vida.
Al acabar la sesión, Marta acude a casa de Alba para recriminarle no habérselo contado, ¿no pensó que eso lo podrían usar en su contra? “Éramos unos críos y fueron cuatro besos tontos”, asegura Llorens.
El juicio prosigue y está reñido, aunque la opinión pública está con Alba. No obstante, Mercedes decide usar el testimonio de una doctora en psiquiatría para salvar a Rubén, quien se ha ganado la antipatía de todos en el juicio después de que Jacobo afirmara que su primo había practicado sexo en grupo anteriormente.
La doctora se llama Mireia, que trata al hijo de Mercedes desde los seis años. “¿Quiere alegar que Rubén Entrerríos es incapaz?”, pregunta la jueza. “Quiero decir que, casi todo el tiempo, son otros los que deciden por él y hay una figura que tiene una gran influencia sobre Rubén, su primo Jacobo”, sentencia Mireia. Tras lo ocurrido, Iván no duda en convocar a la Junta: “Has decidido salvar a tu hijo y sacrificar al mío".
Por su parte, Marta no cree que sea la primera violación en grupo que cometen los Entrerríos y recurre a Giner para buscar otra víctima que pueda declarar. Y así, Marta, Alba y la teniente Giner descubren nuevas víctimas, pero las denuncias se retiraron poco después de ponerlas. La abogada intenta contactar con dos de ellas, Lucía Soler e Isabel Gutiérrez, para que testifiquen en el juicio. Tras recibir el rechazo de Isabel, que le cuelga el teléfono al escuchar de qué se trata, decide usar otra estrategia con Lucía.
Marta se hace pasar por una persona que necesita ayuda con el inglés y se cita con Lucía en el bar de Toño, allí está Alba dispuesta a hablar con ella y conseguir su apoyo.
“Una noche después de dar la clase me invitaron a que me quedara a cenar con ellos. Estábamos todos en la mesa cuando noté una mano encima de mi pierna por debajo del mantel. Intenté apartarme, pero no pude y me susurró al oído que no dijera nada a nadie si no quería que me despidieran. Con la otra mano se bajó la cremallera del pantalón y me obligó a acariciarle”, cuenta avergonzada la joven. Marta quiere saber de quién se trataba, si Jacobo o Rubén... Su sorpresa es mayúscula al saber que fue Mariano Entrerríos, el padre de Rubén.
Entretanto, Alba y Bruno se ven en secreto, ahora que la joven sabe que es inocente, se apoyan.
La familia de Alba es interrogada por Eloy, pero eso no parece ayudarla mucho. La declaración de César es otra que decepciona, sobre todo a Clara, quien sabe de sus mentiras. Más tarde, hablando con Tirso sobre el caso de Alba, Bego le explica lo fácil que sería todo si el “camello” de los Entrerríos hablase.
Finalmente, llega el momento de visionar la violación en el Tribunal…
El noveno capítulo de "Alba" ¡en imágenes!
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