Joaquín confirma a Jesús que Begoña le ha mentido: no ha estado realizando visitas domiciliarias junto a la doctora Borrell. Entonces, ¿dónde estuvo? Esto y más, en el capítulo 32 de “Sueños de libertad”, el martes 9 de abril en Antena 3 a partir de las 15:45 horas.
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En el episodio anterior de “Sueños de libertad”, emitido el lunes 8 de abril, Damián exigió explicaciones sobre Marcos a Marta, pero ella no se las dio. Begoña visitó a su tía Eugenia después de que María le restregara que no duerme con Jesús.
Luego, Luz y Begoña abordaron ambos temas mientras María escuchaba a escondidas. Y Jesús rechazó a Luis como directivo de la empresa, amenazando con desvelar a sus hermanos que Valentín mató a Clotilde… Al final, Damián contó la verdad a sus hijos…
Avance de lo que pasará el martes 9 de abril en el capítulo 32 de “Sueños de libertad”
Tras la revelación de Damián, Andrés pregunta por Lázaro, y su padre admite que, para salvar del escándalo a la empresa y la familia, acusaron a un inocente… El benjamín se echa las manos a la cabeza, mientras Marta no puede articular palabra. Por su parte, Jesús insiste: “O Luis o yo”.
En el dispensario, donde se recupera Isidro, Luz recuerda al chófer que tiene prohibido hacer esfuerzos. Fina suplica a su padre que se cuide para que ella pueda hacer su vida, como él desea.
Al día siguiente, Andrés se muestra muy enfadado con Damián. No entiende que los suyos taparan un crimen tan grave con tal de proteger sus intereses, arrastrando a Lázaro al suicidio. El exmilitar amaga con hacer justicia, pero el patriarca le advierte de que saldrá perdiendo.
En la fábrica, Carmen confiesa a Claudia que ha quedado en la cantina con el productor de cine. Además, pregunta a su amiga si tiene algo con Mateo. La de Don Benito asegura que solo es un buen amigo.
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Por su parte, Mateo sospecha que don Agustín quiere quedarse con el dinero donado por sus padres al niño con polio. Claudia ve al muchacho obsesionado con la Iglesia y descarta que el cura sea capaz de eso. Sin embargo, Luz asegura al joven que el Hospital de Ciudad Real, donde supuestamente estaba ingresado el pequeño, ya no existe.
En la mansión, muy contenta, Begoña comunica a Andrés que ha ido a visitar a su tía y que la ha visto mejor que nunca, y aprovecha para agradecerle su ayuda. La enfermera nota a su cuñado muy serio, aunque éste se escuda en los nervios por su boda.
Más tarde, Andrés acude a la tienda para hablar con Marta. Ambos no dejan de darle vueltas a lo de Valentín, pero mientras él apuesta por denunciar y no cargar con tan pesado secreto, su hermana cree que lo mejor sería dejar las cosas como están.
Digna, irritada con Damián, le echa en cara que, por celos, mandara a Isidro a hacer esfuerzos. Su cuñada lamenta que el patrón, en lugar de preocuparse por su chófer, le incite a jubilarse y marcharse a su pueblo.
Después, Fina le cuenta a Marta que Isidro le ha dado otro susto y su jefa la consuela cogiéndole la mano. La dependienta le ruega que mantengan las distancias, pues ese tipo de gestos le confunden y le hacen daño. En la cantina, el productor de cine promete a Carmen que, si se pone en sus manos, le lloverán las ofertas y el dinero.
Desencantada con Marta y para hacer feliz a su padre, Fina le pide un peculiar favor a Gaspar: fingir que son novios. El camarero se ofende y, en esas, Isidro aparece por la cantina, escucha la discusión sin ser visto y se marcha sonriendo... Luego, le dice a Digna que su hija sale con Gaspar. “¿Gaspar? Jamás lo hubiera imaginado”, se extraña la cocinera…
Mientras, Joaquín confirma a Jesús que ni Luz ni Begoña han atendido en su domicilio a ningún trabajador de la fábrica. El empresario, sulfurado, se da cuenta de que su mujer le ha mentido. ¿A dónde fue entonces?
Enfadado, Jesús aprovecha la ocasión para acusar a su primo de pergeñar un rocambolesco plan: los Merino pretenden usar a Luis para minar Perfumerías de la Reina desde dentro. “Esta empresa está tan podrida como tú”, le espeta Joaquín. Al llegar a casa, Jesús pregunta a Begoña si hoy también tiene visitas domiciliarias, y ella contesta que aún no lo sabe.
Finalmente, Damián, en presencia de Andrés, informa a Luis de que su petición de entrar en la dirección de la empresa ha sido desestimada. El perfumista ve imposible que Marta haya votado que no, por lo que concluye que Jesús ha hecho otra de las suyas. Cuando su primo se marcha, Andrés comunica a su padre que no denunciará el caso de Valentín. “Elijo la familia”, dice con desgana…
Y en el sanatorio, Begoña vuelve a visitar a su tía, que empieza a hablarle de una hija. Su sobrina recuerda a Eugenia que no tiene hijas mientras… ¡Jesús vigila a ambas guarecido tras un portón!
Si quieres saber más, adelántate a los próximos capítulos en nuestro séptimo avance semanal de “Sueños de libertad”.
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