A escasas horas de su enlace, María sigue dudando de Andrés. Mientras, las monjas aconsejan a Begoña que deje de remover el pasado de Eugenia. Esto y más, en el capítulo 38 de “Sueños de libertad”, el miércoles 17 de abril en Antena 3 a partir de las 15:45 horas.
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En el episodio anterior de “Sueños de libertad”, emitido el martes 16 de abril, Jesús reveló a María que Andrés pagó el sanatorio de la tía de Begoña, y la joven volvió a sospechar que su cuñada y su prometido tienen algo. Gema halló la carta del general Duque falsificada por Damián para hacer que Andrés olvidara a Begoña. “Se casa por lealtad a mi padre”, dijo llorando María tras leerla. Y en el almacén, Tasio fue arrestado por la Guardia Civil…
Avance de lo que pasará el miércoles 17 de abril en el capítulo 38 de “Sueños de libertad”
En el día de su enlace, Andrés recibe de Jesús un sobre con el dinero que le prestó a Begoña para el sanatorio de su tía. El hermano pequeño insiste en que su cuñada recurrió a él porque no confía en su marido, pero el primogénito no está dispuesto a escuchar más lecciones. “¡Pobre María!”, exclama Jesús a escasas horas de la boda de Andrés, que lo fulmina con la mirada.
Mientras, María confiesa a Gema que no sabe si contraer matrimonio “con un hombre que lo hace por obligación”. La sirvienta, que no puede creer que la novia dude a estas alturas, trata de tranquilizarla y le aconseja que hable con Andrés para que le aclare qué significa realmente la carta que encontraron en su habitación.
Más tarde, sin mencionar la misiva, María logra sonsacar a Andrés que llevarla al altar es lo mejor que le ha podido pasar y que junto a ella es el hombre más feliz del mundo.
En la cantina, don Agustín explica a Mateo que tendrá que oficiar la ceremonia solo por enfermedad del titular de la ermita donde se casan Andrés y María. Mientras, el chico le comunica con sorna que una tal Susana le buscaba la noche anterior. El cura no admite insinuaciones y advierte con rabia al joven: “Estoy harto de tus sospechas”.
Luego, la misteriosa mujer aclara a Mateo que es la hermana del párroco de la colonia, la única persona que la ha ayudado desde que su marido la abandonó con tres niños. Afirma que el sacerdote se quedó con el dinero de la caridad para que no la desahuciaran y poder dar de comer a sus hijos.
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En la cocina, Jesús se enfrenta a Digna, acusándola de derramarle el café encima a propósito y de ocupar en el enlace un lugar que no le corresponde, el de madrina. Su tía estalla y le recuerda que Luis se ha marchado por su culpa. “Me alegra que tu madre esté muerta y no vea en lo que te has convertido”, espeta Digna a su sobrino con amargura.
Y en el dispensario, Begoña y Luz ya han contactado con todas las casas de cría de Toledo y siguen sin pistas sobre la supuesta hija de Eugenia. En estas, aparece Andrés, que le cuenta a su cuñada que Jesús le ha devuelto el dinero de la clínica y le ha exigido que no se acerque a ella. “Esto es una despedida”, dice Begoña resignada…
A punto de llegar la hora, ni a Joaquín ni a Luis les apetece ir a la boda de su primo, pero Gema y Luz, respectivamente, consiguen convencerlos.
Begoña y Luz acuden de nuevo a hablar con las monjas, que les recomiendan no seguir indagando sobre la presunta descendencia de la tía de la enfermera. Pero a la religiosa se le escapa un dato revelador: “Háganme caso, esa mujer es mucho más feliz ignorando que su madre es una enferma mental”.
En la mansión, Begoña ya está arreglada y, visiblemente nerviosa, ayuda a Andrés, que no sabe qué decir, a colocarse el pisacorbatas.
En la fábrica, Carmen, preocupada, cuenta a Fina y Claudia que la Guardia Civil ha detenido a Tasio por “una pelea”. La de Don Benito recuerda a su compañera que ya le avisó de que el operario no cambiará nunca.
Entretanto, Tasio sale del calabozo y desvela a Gaspar que lo han arrestado por “zurrar a uno que se lo merecía”, y asegura que volvería a hacerlo otra vez. Después, se encuentra a Claudia en el almacén y le confiesa que el agredido es el productor de cine que llevó a Carmen a la cama.
María llega del brazo de Damián a la ermita, donde la esperan Andrés y el resto de su familia política, y comienza la celebración religiosa. Cuando don Agustín pregunta al novio si desea recibir a María por esposa… Andrés imagina que se está casando con Begoña… Y se queda en blanco, provocando el murmullo entre los invitados…
Si quieres saber más, adelántate a los próximos capítulos en nuestro octavo avance semanal de “Sueños de libertad”.
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