Mientras Claudia besa a Salgado y se descubre la verdadera identidad del asesino de policías, Quintero se convierte en aliado de Bruno para acercarse a Eva. Esta semana en “Servir y proteger”.
Este lunes 1 de febrero, La 1 arranca una nueva ronda de capítulos de la quinta temporada de “Servir y proteger”, ficción policial diaria para las tardes que sigue acumulando éxitos de audiencia gracias a sus emotivas e intensas tramas. Luisa Martín encabeza el elenco actoral junto a Juanjo Artero y Eduardo Velasco, entre otros reconocidos intérpretes.
La semana pasada Miralles tomó una decisión inesperada mientras la policía descubrió que Vlado Khan había encargado el asesinato de Quintero, y en los próximos capítulos, Claudia volverá de Italia y besará a Salgado. Además, la policía descubrirá la verdadera identidad del asesino, y Quintero se convertirá en aliado de Bruno.
Mientras en comisaría están más cerca que nunca de descubrir la identidad del asesino de policías, la relación entre Antonio y Claudia pende de un hilo.
Con Miralles en Italia, Antonio acude cada día a desayunar con Néstor en la Parra. El inspector se ha convertido en un buen consejero ahora que su matrimonio está en horas bajas. Ambos conversan sobre el tema con la mirada puesta en Salgado, que los observa desde la otra punta de la barra. Finalmente, el inspector jefe acaba entablando una conversación que desemboca en un tenso encuentro entre Antonio y Tomás. Era de esperar.
Más tarde Salgado se despide de Mabel a las puertas de la comisaría. El inspector está desencantado tras el encuentro con Antonio… algo que no pasa por alto su exmujer, que termina adivinando que la mujer que ocupa su corazón es Claudia.
Entretanto, en comisaría siguen centrados en el caso del asesino de policías cuando llegan nuevos datos sobre la familia de Lucas Infante.
Por otro lado, Quintero sigue merodeando a Bruno. Sabe que el joven le puede llevar hasta su objetivo y descubre que tiene una importante deuda… lo que, sin duda, puede darle una oportunidad de oro para acercarse a Eva.
Salgado y Bremón continúan investigando el entorno de la familia Infante, es la clave para llegar al asesino. Su objetivo ahora es localizar al chico, algo que está cada vez más cerca cuando descubren la identidad que Lucas adoptó como testigo protegido.
Entretanto, Beatriz es puesta en libertad tras ser detenida por el robo de carteras y se reencuentra con su hermana. El paso por los calabozos de la joven es motivo de una fuerte discusión entre las hermanas Velasco. Eva cree que Bruno es el causante de los problemas de su hermana. Más tarde, Beatriz discute con Bruno a raíz de lo ocurrido con el robo de carteras.
Por otro lado, Mabel y Salgado vuelven a encontrarse. Sin quererlo, la mujer se ha convertido en una buena consejera en temas amorosos para Tomás. Lo cierto es que no puede seguir así y debe tomar una decisión, si de verdad siente algo por Miralles, le recomienda que se arriesgue con ella, o que se aleje y pida el traslado.
Miralles vuelve de Italia y se reincorpora a la investigación sobre Lucas Infante. Ahora, conociendo la verdadera identidad del joven, los inspectores descubren que estuvo en la Academia Militar de Zaragoza… pero ¿por qué abandonó? Paralelamente, Salgado se propone conquistar a Miralles y, pese a que todo parece perdido, Miralles termina dándole un beso…
Por otro lado, Eva da un voto de confianza a Beatriz después de que la joven le prometa que no volverá a cometer los mismos errores. La empresaria tiene que hacer un viaje y en su ausencia, la deja al cargo del negocio familiar.
Mientras, Bruno recibe un plazo de 24 horas para pagar la deuda a Celso… Quintero se acerca a él de nuevo y se convierte en su aliado, le cuenta que las hermanas Velasco trafican con armas.
Claudia se siente perdida tras lo ocurrido la noche anterior con Salgado. La atracción que siente por él es evidente, así que Miralles hace lo posible por evitar a Salgado después del beso que se dieron la noche anterior. Sin embargo, aunque trata de evitarlo sin ir a comisaría, el inspector se presenta en su casa aprovechando que Antonio está de viaje.
Por otro lado, Bruno descubre el escondite secreto donde Eva guarda las armas en la mensajería. No contento con eso, también roba el dinero que Eva dejó a Beatriz, y se lo juega en una partida de póker.
La investigación sobre el asesino de policías sigue siendo prioridad en Distrito Sur. Aunque cada vez tienen más datos sobre la persona que se esconde detrás de él, aún no han conseguido localizarlo. Para intentar llegar a Lucas, Claudia y Salgado buscan a una antigua novia. Mientras, Antonio regresa de su viaje a Valladolid ajeno a todo lo ocurrido entre su mujer y Tomás.
Por otro lado, Bruno tendrá que espiar en la mensajería para Quintero, que ha comprado parte de su deuda con Celso.