
Jana idea un plan para rescatar al niño de Pía del convento… pero necesitará la ayuda de Abel y Manuel. La euforia de la victoria llevará al médico a besar a la doncella, lo que dejará al señorito tocado y hundido. Por otro lado, Cruz tendrá un as bajo la manga para retener a Jimena en su palacio. Te contamos lo que pasará en los capítulos del 11 al 15 de septiembre en "La Promesa", la serie diaria de La 1.
“La Promesa” se prepara para una semana trepidante donde, por fin, seremos testigos del rescate del bebé de doña Pía, cuya desaparición ha tenido con el alma en vilo a todos los espectadores. Además, Jana caerá rendida ante Abel...
La ficción de época es la reina de la sobremesa con sus romances, secretos, venganzas y asesinatos en este palacete ambientado en la España de 1913.
Producida por RTVE, StudioCanal y Bambú, la serie cuenta en su reparto con Ana Garcés (Jana), Arturo Sancho (Manuel), Eva Martín (Cruz) y Manuel Regueiro (Alonso), entre muchos otros rostros más y menos conocidos de la televisión.
A continuación, en vemosTV te ofrecemos un completo avance de lo que pasará en los próximos capítulos, ¡no te lo puedes perder!
La semana anterior, Jana pidió ayuda a Manuel para volar hasta Puebla de Tera y adquirir un medicamento que pudiera curar a Pía. Además, Antonio de Carvajal llegó para cortejar a Martina, aunque también puso el ojo en Catalina. Mientras tanto, Feliciano le dio a Teresa una pista para encontrar al bebé robado.
En los siguientes episodios, veremos cómo Jana y compañía se las ingenian para rescatar a la criatura del ama de llaves, mientras que siguen las disputas entre los Marqueses y los padres de Martina. Además, Cruz se saca un as bajo la manga para disuadir a Jimena de irse a Madrid. Te contamos todo a continuación, capítulo a capítulo.
Jana y Abel no se lo piensan dos veces y se plantan en el convento de Villalquino para averiguar si el bebé de doña Pía, en efecto, está allí.
Mientras tanto, Mauro mantiene sus sospechas hacia Feliciano, pues está seguro de que el lacayo sabe algo de lo sucedido con el niño. Aun así, Teresa lo defiende a capa y espada, pues tiene confianza ciega en él.
En cuanto a doña Pía, el ama de llaves mejora cada día, aunque aún sigue bastante débil. Todos sus compañeros se esmeran en cuidarla, menos Candela, que sigue destrozada después de que robaran al bebé delante de sus narices, y no se atreve a mirar a Pía a la cara.
Simona pide ayuda a don Carlos para animar a Candela, pero el maestro tampoco consigue que la mujer entre en razón.
Por su parte, Cruz se ha propuesto ir a la fiesta de Alfonso XIII sea como sea, por lo que Alonso pide ayuda a Manuel para que intervenga. El señorito lo consulta con Jimena, y entre todos acuerdan invitar a don Antonio a volar en el aeroplano de Manuel.
El joven se queda tan fascinado con el vuelo que, finalmente, ordena gestionar también las invitaciones de los Luján a la garden party de Su Majestad. ¡Misión cumplida!
Por otro lado, don Antonio de Carvajal y Cifuentes al fin se queda a solas con Martina y trata de besarla. Ella, no obstante, se mantiene firme en su decisión, pues su corazón pertenece a Curro.
Jana y Abel se marchan del convento con más dudas que con las que llegaron. Ni siquiera saben si el bebé está allí. Todos en el servicio están desesperados ante la imposibilidad de recuperar al hijo de Pía, pero Jana todavía tiene un as en la manga…
Por otro lado, Cruz disfruta a lo grande anunciándole a Margarita que ellos también están invitados a la fiesta del Rey. Esto traerá más enfrentamientos entre ambas parejas, pues Alonso y Fernando no dejan de discutir.
La buena de Catalina intenta mediar entre su padre y su tío, pero parece que ellos no están por la labor de limar asperezas.
En cuanto a Salvador y Lope, ambos tienen un acercamiento y parece que su amistad pasada vuelve a resurgir. La que no sabemos si tiene arreglo es la de Pía y Candela, pues la ayudante de cocina le echa valor y acude a hablar con el ama de llaves para disculparse por el robo de su bebé.
Martina se encuentra en una encrucijada donde se siente agobiada por sus padres y don Antonio, obsesionados por la boda, y Curro, a quien ama de verdad.
El muchacho tampoco está atravesando su mejor momento y acude a Jana para contarle todas sus penas.
Mientras tanto, Abel y Jana no se vienen abajo tras fracasar en el convento y buscan un nuevo aliado para su plan de rescate: Manuel. El señorito accede encantado a ayudarles.
Por su parte, María convence a Salvador de que aparte su orgullo y acepte el dinero de sus compañeros para operarse de la vista.
Por otro lado, Manuel le cuenta a su madre que Jimena no tiene intención de ir a la fiesta del Rey y que, además, quiere marcharse a Madrid de inmediato. Cruz suplica a su hijo que haga cambiar de opinión a su esposa, pero lo cierto es que la Marquesa ya tiene un plan en mente...
Jana y Abel regresan al convento decididos, esta vez sí, a salir de allí con el niño de Pía. El señorito Manuel será vital para que puedan localizar al bebé. Por otro lado, la euforia del momento lleva al médico a besar a Jana, todo a ojos de Manuel, que se queda atónito y comprende que, si no lo impide, perderá a Jana para siempre. ¿Sería capaz de soportarlo?
Mientras tanto, en palacio, los miembros del servicio esperan el retorno triunfal de sus compañeros, al tiempo que Teresa y Feliciano siguen acercando posturas, esta vez, más que nunca.
En cuanto a Lope, el cocinero se da cuenta de que Salvador otra vez le está quitando terreno, pues cuanto mejor está con María, más difícil se vuelve para él tenerla como novia.
Don Antonio de Carvajal, por su parte, no se rinde con Martina, pero se da cuenta de que la muchacha ha construido un muro entre ellos. Harto, le pregunta si es que existe otro hombre en su vida.
Por otro lado, Catalina hace un último intento de poner paz entre Alonso y Fernando, pero lo único que logra es ser despachada con cajas destempladas por su tío. Y, por si fuera poco, tendrá un fuerte encontronazo con Cruz.
Finalmente, y para alegría de todos, Abel, Manuel y Jana consiguen sacar al bebé de Pía del convento de Villalquino y entregárselo a su madre. El ama de llaves no puede estar más feliz, pues ha recuperado a su hijo y cada día se siente mejor, aunque aún no es momento de volver al trabajo…
En cuanto a don Antonio, el joven tiene dudas sobre el pasado sentimental de Martina y recurre a sus primos par que le cuenten, a sus espaldas, si tuvo anteriores pretendientes. Martina, molesta por este interrogatorio clandestino, se encara al joven heredero.
Mientras tanto, Feliciano le cuenta a Petra que en el servicio han logrado recuperar al bebé de Pía. A Petra le cambia el gesto y teme que la Marquesa se entere, pero, cuando llega a verla, se da cuenta de que es demasiado tarde... Cruz ya lo sabe todo.
La Duquesa de los Infantes, por otro lado, se despide de su hija, no sin antes ultimar los detalles sobre el falso embarazo de Jimena, ¿qué habrán planeado madre e hija al respecto?