Alonso idea una estrategia para encontrar a quien quiere asesinar a Curro mientras el conde de Ayala, viejo amigo de Cruz, llega a palacio. Y María, cansada de cómo tratan a los criados, se subleva. Te contamos todo esto y mucho más sobre lo que pasará en los capítulos del 19 al 23 de febrero en la serie diaria de La 1.
Fátima Cruz
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En los próximos capítulos de “La Promesa” el marqués de Luján trazará un plan para descubrir al asesino de la cacería, que provocó la muerte de Feliciano y estuvo a punto de acabar con la vida de Curro. ¿Qué pensará hacer Alonso? Cruz y Lorenzo tienen motivos para preocuparse.
Producida por RTVE, StudioCanal y Bambú, esta aclamada ficción de época cuenta en su reparto con Ana Garcés (Jana), Arturo García Sancho (Manuel), Eva Martín (Cruz) y Manuel Regueiro (Alonso), entre muchos otros rostros más y menos conocidos de la televisión.
A continuación, en vemosTV te ofrecemos un completo avance exclusivo de lo que pasará en los próximos capítulos, ¿te lo vas a perder?
La semana anterior, la muerte de Feliciano dejó a todos devastados en el palacio de los Luján, mientras que Cruz confirmó sus sospechas de que el lacayo era, en realidad, el hijo de Petra. Por otro lado, Abel y Jana lograron operar a Curro, pero el joven sufrió una recaída. En cuestión de amores, Catalina pidió matrimonio a Pelayo; Manuel y Jana volvieron a discutir y Vera se dedicó a ir preguntando a todos acerca de Lope, del que está empezando a enamorarse. ¡Ah! Y llegó Virtudes, la hija de Simona.
En los siguientes episodios, Alonso hará todo lo posible por averiguar quién quiso matar a Curro. ¿Conseguirá llegar a alguna conclusión? Te contamos todo esto y mucho más a continuación, capítulo a capítulo.
Avance capítulo 294 (lunes 19 de febrero): La decepción de Vera, las dudas de Jana y la competición de Manuel
Jana no deja de lado a Abel, aunque las palabras de Manuel retumban en sus oídos. ¿Y si es cierto que el médico miente? Manuel, por su lado, se prepara para la competición de vuelo y ni la mismísima Cruz podrá evitar que cumpla su sueño.
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Mientras tanto, parece que Curro se recupera poco a poco, a la vez que Alonso investiga lo que pudo ocurrir en la cacería. Cruz y Lorenzo entran en pánico, pues temen que haya algún cabo suelto que destape su autoría.
Por otro lado, Jerónimo vuelve a escena para decirle a Pelayo que ha logrado un nuevo acuerdo comercial con Mr. Cavendish, pero necesita un lugar donde esconder las armas… y ya no puede ser en palacio. Además, el socio del conde de Añil descubre por casualidad que Pelayo y Catalina van a casarse, lo que le hace poner el grito en el cielo, pues eso afecta directamente a sus tejemanejes.
En cuanto a Vera, Candela le advierte de que el cocinero tiene toda la pinta de seguir enamorado de María Fernández. Sin embargo, ella no hace caso y le pide a Rómulo un cambio de turno para coincidir con Lope en su tarde libre. Lo que no espera es llevarse una decepción.
Doña Pía y don Rómulo, por su parte, se enteran de que María Fernández y Salvador quieren contraer nupcias cuanto antes. El mayordomo y el ama de llaves se ven en la tesitura de decirles que deben dejarlo para más adelante, pues no es el momento.
Paralelamente, Simona sigue su acercamiento con Virtudes, pero todo se tuerce cuando Candela le advierte de que la chiquilla no le está contando toda la verdad acerca de Antoñito.
Avance capítulo 295 (martes 20 de febrero): Manuel regresa con grandes noticias y Alonso se acerca a la verdad
Simona decide ser clara con Virtudes y le pide que le explique por qué no le ha contado toda la verdad acerca de Antoñito. ¿Por qué no quiere verla?
Mientras tanto, María Fernández y Salvador hacen caso omiso de las directrices de sus superiores cuando les obligan a posponer su boda hasta que se celebre el enlace de la señorita Catalina con el conde de Añil. Al mismo tiempo, María Fernández descubre que Vera suspira por Lope, así que le pondrá los puntos sobre las íes a la nueva mediante una seria advertencia.
Por otro lado, Manuel llega eufórico de la Copa Herzog, pues ha logrado clasificarse para la final. El señorito no puede esperar a compartir la noticia con Jana.
Curro, por su parte, va recuperándose, aunque sigue abatido tras conocer la muerte de Feliciano. Jana le confesará que tiene remordimientos por no haber estado más pendiente del lacayo.
En cuanto a Alonso y Rómulo, los dos siguen haciendo averiguaciones sobre el accidente de caza y cada vez andan más cerca de atrapar al asesino.
Avance capítulo 296 (miércoles 21 de febrero): El conde de Ayala llega a palacio
Un nuevo visitante se deja caer por el palacio de los Luján. Se trata del conde de Ayala, un amigo de la infancia de la marquesa y de su fallecido padre, el barón de Linaja. Esta persona, no obstante, no será muy bien recibida debido a su personalidad altanera y sarcástica.
Por otro lado, Cruz intenta parar los pies a Alonso para que no siga investigando el accidente, pero poco puede hacer, porque su marido no piensa parar hasta encontrar al culpable de querer asesinar al muchacho.
Mientras, Virtudes se molesta con Candela por haberle contado a Simona que Antoñito no quiere verla. Aun así, Candela sigue defendiendo su postura, pues cree que su amiga merece saber la verdad.
Vera, por su parte, insiste en su plan de acoso y derribo hacia Lope. Hasta los más nuevos del lugar, como Virtudes, se dan cuenta del juego que se trae la doncella. ¿Piensa parar en algún momento?
Además, Alonso llama la atención a Rómulo. ¿El motivo? Salvador ha roto todos los protocolos y ha ido en persona a pedir permiso al marqués para casarse con María Fernández.
Y hablando de bodas, la de Catalina y Pelayo sigue teniendo muy preocupado a Jerónimo, que intenta hasta el último momento convencer al conde de Añil de que se está metiendo en la boca del lobo, pues tener a Catalina tan cerca dificultará enormemente el negocio de las armas.
En paralelo, Manuel no puede creerlo cuando es testigo de la buena sintonía que existe entre Jana y Abel, ¿es que la doncella no ha entendido nada? En cuando a Abel, el marqués le pide algo un tanto desconcertante en relación con Curro… ¿Qué será?
Avance capítulo 297 (jueves 22 de febrero): El plan de Alonso para cazar al asesino
Alonso ha trazado un plan para desenmascarar al malnacido que quiere matar a Curro, pero primero debe mantener al joven a salvo. Para ello, lo aísla junto a Jana y Abel, que velarán por su seguridad y su salud.
Por otro lado, el conde de Ayala sigue generando polémica. Ni siquiera Manuel, Martina, Margarita o Lorenzo podrán aguantar sus ácidos comentarios. ¿Cuándo se va a marchar?
Mientras, en el servicio, el interés de Vera por Lope es ya tan descarado que doña Pía tiene que llevársela aparte y hablar seriamente con ella. Pía también usará su psicología con Virtudes, pues la muchacha le cuenta que no deja de darle vueltas al pasado de Simona.
En cuanto a María Fernández, la doncella descubre que su novio metió la pata y tuvo la osadía de hablar con el marqués para que permitiera su boda. ¿En qué estaría pensando?
Avance capítulo 298 (viernes 23 de febrero): María se rebela
Jana aprovecha su aislamiento con Curro para disfrutar de tiempo de calidad como hermanos y seguir estrechando sus lazos sin despertar las sospechas de nadie. Además, el señorito pide hablar personalmente con Petra y Teresa para darles el pésame por la muerte de Feliciano, pues ha sabido que ya han regresado del pueblo.
Mientras, en la zona noble todos celebran la marcha del conde de Ayala a ese viaje de negocios por Europa. Pero la alegría les dura poco cuando Cruz se encarga de invitarle a pasar con ellos una larga temporada. La marquesa no da puntada sin hilo, ¿por qué ha hecho regresar al conde? ¿Qué trama?
En cuanto a Catalina, la joven vive ajena a los negocios oscuros de Pelayo y Jerónimo, preocupada porque su boda es la comidilla de todos en el palacio. El conde, por su parte, no quiere ceder otra vez a las pretensiones de Mr. Cavendish. ¿Qué querrá ahora el inglés?
Vera, por su parte, recibe el ánimo de todos sus compañeros, que la incitan a decirle a Lope lo que siente. Pero su decepción es mayúscula cuando, en efecto, se da cuenta de que él sigue loco por María Fernández.
Y precisamente María y Salvador son sancionados por haberse saltado las normas e ir a hablar con el marqués. El lacayo se disculpa, pero la doncella está harta de injusticias y no piensa quedarse callada. ¡Que se preparen!
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