El ama de llaves de los Marqueses de Luján lleva ya un tiempo comportándose de forma algo extraña con Santos, a quien se ha empeñado en convertir en primer lacayo. ¿Acaso quiere Petra que el díscolo hijo de Ricardo Pellicer ocupe el lugar que dejó Feliciano en su vida?
La evolución del personaje de Petra en “La Promesa”, la serie diaria de época que lidera las tardes en La 1 de TVE, está siendo fascinante.
La conocimos como doncella personal de Cruz, la Marquesa de Luján. Y no solo eso, sino que además era su cómplice en asesinatos y fechorías (ayudó a su señora a encubrir la muerte de Tomás, el hijastro de Cruz).
Pero todo cambió cuando llegó al palacio Feliciano, a quien hizo pasar por su hermano, siendo en realidad su hijo. El chico fue criado por su abuelo en el pueblo mientras ella continuó con su vida al servicio de los Marqueses.
El secreto no tardó en salir a la luz y ella misma sorprendió al inocente Feliciano con la noticia de que era su verdadera madre. Él logró reponerse del golpe y darle una oportunidad a la que siempre había considerado su hermana y ella, liberada de la culpa, empezó a comportarse con Feliciano como una madre.
Entre otras cosas, le ayudó a ser un buen lacayo y le enseñó todo lo que necesitaba saber para desenvolverse como el mejor en su trabajo. Feliciano comenzó como ayuda de cámara de Fernando, el padre de Martina. Pero, tras su repentina muerte, se le asignó servir al señorito Curro. Con el sobrino de los Marqueses entabló una amistad que duró hasta su muerte, cuando una bala perdida acabó con su vida.
Petra, hundida, descubrió que su hijo había muerto por culpa de la Marquesa, que pretendía asesinar a Curro durante una cacería. Se prometió vengarse, y con ella el Conde de Ayala, que resultó ser el padre biológico del muchacho.
Sin embargo, los meses han pasado y Ayala se ha perdido en su relación con Margarita, mientras que Petra, convertida en ama de llaves tras chantajear a Cruz, ha encontrado en Santos un diamante en bruto al que moldear a su gusto.
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Santos, ¿el reemplazo de Feliciano?
Cuando parecía que Petra se había recuperado de la pérdida de su hijo, dentro de lo posible, muchos espectadores han señalado que su comportamiento con Santos, el díscolo hijo del señor Pellicer, podría indicar que ha perdido completamente la cabeza.
Santos llegó al palacio de los Luján por expreso deseo de su padre, Ricardo, y de Rómulo. Ambos mayordomos acordaron que el muchacho empezaría a trabajar para los Marqueses con el objetivo de ayudarle a centrarse después de un pasado bastante problemático.
El chaval pronto llamó la atención de Petra, pues no tuvo reparos en enfrentarse a sus compañeros desde el primer momento. Ella, que se sabe odiada por todos, acogió al chico bajo su regazo y comenzó a tratarle como su ayudante personal, haciéndole encargos y pidiéndole que la tuviera al día de todos los cotilleos del servicio.
Pero en los últimos episodios la cosa se ha tornado un tanto siniestra cuando el ama de llaves ha comenzado a instruir a Santos para ser primer lacayo. Precisamente el puesto que dejó libre Mauro y que Petra siempre soñó para Feliciano.
Y no solo eso, sino que le ha sugerido al chico que se cambie el peinado y se deje bigote, exactamente el mismo aspecto que tenía Feliciano cuando trabajaba allí.
Santos está algo contrariado con tanta atención por parte de Petra, aunque se deja llevar, pues es ambicioso y con tal de escalar en la jerarquía del servicio es capaz de cualquier cosa.
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Petra ha conseguido, incluso, que Santos deje en paz a Vera y a Lope, todo un logro. No obstante, no sabemos hacia dónde conducirá esta trama, ¿formará parte de la venganza que Petra planea contra Cruz por la muerte de Feliciano o simplemente nos van a mostrar cómo ella pierde el juicio definitivamente creyendo que Santos es su hijo?
Tendremos que estar atentos a los próximos episodios para comprobarlo.