Si por algo se caracteriza “La Promesa” es por sus tramas donde las mentiras, las alianzas, los secretos y hasta los asesinatos tienen un protagonismo especial. Es por eso que la serie no tendría sentido sin sus villanos, personajes que generan amor y odio a partes iguales. Hacemos un repaso de todos los que han pasado por el palacio de los Luján hasta ahora.
Fátima Cruz
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En “La Promesa” nada tendría sentido sin sus villanos, los malos, malísimos de la serie que tanto juego dan y que acumulan igual número de fans que de detractores. Desde el inicio de la ficción de época que arrasa en la sobremesa hemos conocido ya a unos cuantos villanos.
Algunos se fueron para siempre, otros no sabemos si volverán, mientras que algunos se mantienen fijos en el palacio de los Luján, engañando a todos como lobos con piel de cordero.
Hacemos un repaso de todos ellos, ¿cuál es tu favorito?
Cruz Ezquerdo, la Marquesa de Luján
Doña Cruz es, probablemente, la principal villana de “La Promesa”. Ya desde el primer capítulo vimos cómo no tuvo escrúpulos en asesinar a Tomás, su hijastro, para evitar que éste siguiera investigando sobre el pasado de Dolores, la madre de Jana.
No obstante, la Marquesa se las ingenió para salir airosa de la investigación. Es una mujer de armas tomar que no piensa permitir que nadie se interponga en su camino.
Juan Ezquerdo, el barón de Linaja
Aunque ya hace tiempo que pasó a mejor vida, lo cierto es que Juan Ezquerdo, el padre de la Marquesa, fue el primer personaje de la serie que nos puso los pelos de punta de puro terror.
“La Promesa”: ¿Confesará Ramona toda la verdad a Jana y Curro?
Un señor inteligente, calculador y abusador, que se hizo rico traficando con esclavos. Dejó embarazada a doña Pía, el ama de llaves, tras forzarla repetidamente a escondidas. Su última víctima fue Teresa, la doncella, pero con la ayuda de Jana, María y Pía, logró deshacerse de él para siempre.
Por otro lado, existe la sospecha de que el Barón pudo ser quien mató a Dolores. Jana vio cómo lucía un anillo con el sello de La Promesa, igual al que llevaba la persona que mató a su madre. Sin embargo, más tarde supo que ese anillo era una joya familiar de los Luján, por lo que cualquiera podría haberlo llevado en el momento del asesinato.
El padre Camilo
Otro de los malos que ha pisado La Promesa es el padre Camilo, un cura que llegó sin avisar y que logró meterse, literalmente, hasta las cocinas. Se ganó la confianza de Petra, lo que le permitió investigar a los miembros de la familia y del servicio con total impunidad.
Finalmente, se supo que don Camilo era un espía enviado por los Duques de los Infantes para asegurarse de que la familia con la que iba a emparentar Jimena, su hija y heredera, era de fiar.
La trama terminó de forma abrupta cuando el falso sacerdote, sabiéndose descubierto, amenazó a punta de pistola al Marqués, al comisario y hasta al propio Lope. Por suerte, todo quedó en un susto, don Camilo fue a la cárcel y no hemos vuelto a saber nada más de él.
Lorenzo, el capitán de la Mata
Lorenzo es el marido de Eugenia, hermana de Cruz, y por tanto el supuesto padre de Curro. Le precede una fama de mujeriego y maltratador. Los rumores dicen que dejó a su esposa en silla de ruedas tras una paliza. Palizas que también sufría su hijo.
El capitán llegó a La Promesa tras la muerte del Barón de Linaja, como perro de presa que acude a por su parte del premio. Lo hizo en compañía de la Baronesa de Grazalema, a quien el fallecido había dejado gran parte de su herencia.
Más tarde se supo que ambos tenían un plan perfectamente trazado para quedarse con los bienes del Barón e incluso con La Promesa entera, algo que, de momento, Lorenzo está logrando poco a poco…
Elisa, la Baronesa de Grazalema
Elisa de la Vega, la Baronesa de Grazalema, sorprendió a todos al ser nombrada la principal heredera del Barón de Linaja. Además, pronto se supo que había sido un amor de juventud de Alonso, el Marqués de Luján. Esto provocó su enemistad con Cruz desde el primer momento.
La Baronesa estaba aliada con Lorenzo para quedarse la fortuna de los Luján, pero acabó siendo traicionada por él, que además era su amante. Finalmente, tuvo que hacer las maletas y marcharse de allí sin conseguir nada, aunque no podemos descartar que regrese algún día para vengarse de aquellos que le impidieron conseguir su propósito.
Jimena de los Infantes
Jimena, hija de los Duques de los Infantes, se nos presenta al inicio de la serie como la esposa de Tomás, heredero de los Marqueses de Luján. Tras la muerte de su marido, asesinado la misma noche de bodas, la muchacha termina casándose con Manuel, el hermanastro de éste y nuevo heredero.
A pesar de que al principio parece una mosquita muerta, como la misma Cruz la denomina, con el paso del tiempo nos dimos cuenta de que Jimena es mucho más lista de lo que parece. Una versión en joven de la Marquesa, capaz de todo con tal de conseguir retener a su lado a su nuevo marido, el atractivo Manuel.
Petra Arcos
Petra es la doncella personal de la Marquesa de Luján, su perro fiel y cómplice incluso del asesinato de Tomás.
Nadie se fía de ella, pues todos en el servicio saben que Petra informa a Cruz de todo lo que acontece en el palacio.
Hace poco supimos el verdadero motivo por el que Petra tiene una lealtad tan grande con la Marquesa, y es que ésta ayudó a la doncella cuando trabajaba para el Barón de Linaja y uno de los mozos de la casa quiso abusar de ella.
No obstante, Petra aún esconde algunos secretos que nos quedan por descubrir, como su verdadera relación con Feliciano, recién llegado a La Promesa.
Gregorio Castillo
El último de los villanos que ha abandonado el palacio de La Promesa ha sido Gregorio. El hombre llegó como mayordomo para sustituir a Rómulo. Sin embargo, su actitud autoritaria no gustó a los criados.
Al final, se ganó la confianza de Pía, el ama de llaves. Tanto, que logró casarse con ella haciendo creer a los Marqueses que el hijo que esperaba la mujer era, en realidad, suyo.
Desde entonces, Gregorio cambió radicalmente de forma de ser mostrándose cariñoso y atento, aunque algunos detalles hacían ver que era controlador con su esposa… Tanto, que se supo que estaba envenenándola con cicuta para hacerle abortar ese bebé que él sabía bien que no era suyo.
Por suerte, Rómulo apareció en escena justo cuando Gregorio estaba agrediendo a Pía después de que ella lo descubriera todo. La Guardia Civil se lo llevó detenido y ahora está a punto de ser juzgado. ¡Esperemos que no regrese!
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